Centrados en Cristo
Jesucristo es el centro de nuestra comunidad. Él invita a todos. A través de él, experimentamos la unidad en la diversidad.
Abiertos
¡En global local, todo el mundo es bienvenido! Cualquiera puede experimentar la comunidad a través de global local. Todos formamos parte de la gran familia de Dios. Nos gusta abrirnos a los otros, hablarles sobre nuestras vidas y reflexionar sobre nuestras actitudes, perspectivas y tradiciones.
Agradecidos
Respetamos nuestras similitudes y nuestras diferencias. No devaluamos las diferencias ni aquello que nos resulta incomprensible, ni tampoco nos ponemos por encima de ello. Nos tratamos con comprensión y empatía. Queremos ver en quien tenemos delante la persona que Dios ve. Vivimos encuentros valiosos desde el respeto.
En comunidad
Nos damos espacio para expresarnos y buscar lo que tenemos en común. En global local, todos estamos juntos en el camino. Emprendemos proyectos conjuntos y nos reunimos para hacer actividades comunes. Cada persona es una pieza esencial que contribuye con sus dones a global local.
Tolerantes con los errores
Como seres humanos, sabemos que somos aprendices de por vida y que todos cometemos errores. No somos perfectos. Contamos con que habrá errores. Queremos apoyarlos, ser sinceros con nosotros mismos y con los demás, perdonarnos los unos a los otros, reírnos de nosotros mismos y seguir adelante unidos como una comunidad de aprendices.
Valientes
Llevados por el amor de Dios, nos acercamos los unos a los otros aunque todavía no nos conozcamos. Llenos de esperanza, construimos el reino de Dios a través de global local y damos por hecho con que Dios nos da su bendición. Sentimos que a través de nuestros encuentros y comunidad intercultural nos encontramos con Dios de una manera completamente nueva, descubrimos nuevas formas de ver y percibir las cosas, creamos nuevas experiencias y crecemos por dentro.
